miércoles, 2 de abril de 2008

El carpintero y sus herramientas

Cuentan que en una carpintería hubo una extraña asamblea. Fue una reunión donde las herramientas discutieron sus diferencias...
El martillo ejercía la presidencia, pero el resto le exigía su renuncia... la causa?
Hacía demasiado ruido y además se pasaba todo el tiempo golpeando.
El martillo aceptó su culpa, pero pidió que también fuese expulsado el destornillador, alegando que daba muchas vueltas para conseguir algo.
El destornillador aceptó los argumentos, pero a su vez pidió la expulsión de la lija. Dijo que era muy áspera en el trato con los demás...
La lija acató, con la condición que se expulsase al metro, el cual siempre medía al otro según su medida como si fuese el único perfecto.
En ese momento entró el carpintero, juntó a todos e inició su trabajo.
Utilizó el martillo, la lija, el metro y el destornillador...
la rústica madera se convirtió en hermosos muebles.
Cuando el carpintero se fue , las herramientas retomaron la discusión.
Pero el serrucho se adelantó a decir:
“ Señores, quedó demostrado que tenemos defectos, pero el carpintero trabaja con nuestras cualidades, resaltando nuestros puntos valiosos... por eso en lugar de fijarnos en nuestras flaquezas, debemos concentrarnos en nuestros puntos fuertes”
Entonces la asamblea entendió que el martillo era fuerte, que el destornillador unía y daba fuerza, la lija era especial para limar asperezas... y el metro era preciso y exacto.

Se sintieron como un equipo, capaz de producir cosas de calidad... y una gran alegría los embargó al darse cuenta de la suerte que tenían de poder trabajar juntos.

No hay comentarios: